martes, 14 de diciembre de 2010

Peloteros de Grandes Ligas y el empresario Osvaldo Rodríguez entregan útiles escolares y deportivo‏


Haina.-La liga de softball los Riferos de Haina, que preside el empresario Osvaldo Rodríguez (La Fortuna), sostuvo el domingo un partido de exhibición con los jugadores de grandes ligas y ex peloteros, el mismo se efectuó en el play de softball Thomas Santana, sector de Gringo, Haina.

El municipio de Haina vivió uno de los momentos más importantes en su historia, al lograr que los Big Leaguer hicieran acto de presencia, entre ellos Francisco Cordero, cerrador de Rojos de Cincinnati; Esteban Germán, utility de los Rangers de Texas; Eddy Garabito y Jhayson Agustín, de los Toros del Este; Cristhián Martínez, lanzador de los Bravos de Atlanta; Tony Blanco, inicialista de los Chunichi Dragons, Japón; Vladimir Pérez, coach de bullpen de los Tigres del Licey, entre otros.

En la actividad se hizo entrega de útiles deportivos y escolares a las diferentes ligas deportivas de dicha comunidad. Cientos de niños que acudieron al estadio vivieron un día que jamás olvidaran al poder ver de cerca de sus ídolos de la Gran Carpa, además del regalo recibido.

La actividad llamada “Los Grandes Ligas con los Niños de Haina”, también asistió el alcalde Marino Lora Hidalgo, quien se comprometió acondicionar y dotar de mejores instalaciones para un mejor funcionamiento del estadio de softball.

La misma contó con el apoyo del consocio de Bancas Osvaldo La Fortuna, Centro Odontológico La Gran Familia, estación de combustibles Don Lincon, ARS Simag, Prestamos Personales Inoa y el cabildo del municipio Haina.

El joven empresario Osvaldo Rodríguez expresó realizar esta actividad con el fin de que los niños de la comunidad se sientan bien y que se puedan verse en el espejo de esos grandes ligas, “es la primera vez que se realiza un encuentro con los peloteros”. Y al mismo tiempo aseveró que anhela que para próximo año 2011 se repita dicho acontecimiento.

El lanzamiento de honor estuvo a cargo del cerrador Francisco Cordero, receptor Osvaldo Rodríguez, bateador Cristhián Martínez, y el árbitro fue Marino Lora.

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